
Como diputado provincial y ciudadano de Mendoza, me presento ante el Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) para expresar mi absoluto rechazo al ajuste tarifario propuesto por AySAM S.A. para el año 2025. Este aumento no solo carece de fundamentos claros, sino que también refleja una alarmante falta de transparencia y un desprecio hacia los derechos de los usuarios mendocinos.
Desde hace años, vengo exigiendo que la empresa concesionaria y el organismo regulador brinden información adecuada y veraz sobre la gestión del servicio de agua potable y saneamiento. Sin embargo, nos encontramos nuevamente ante una audiencia pública donde la falta de rendición de cuentas y la ausencia de auditorías externas son la norma. Esto no solo es una violación a los principios de transparencia, sino también un acto de desconsideración hacia los ciudadanos que confían en estos servicios esenciales.
Exigencias para una Gestión Responsable
En esta ocasión, reitero una serie de pedidos que considero fundamentales para garantizar la equidad y la transparencia en la gestión del agua en Mendoza:
- Rendición de cuentas y auditorías externas:
Exijo que AySAM S.A. y el EPAS presenten un informe detallado sobre el uso de los fondos administrados, especialmente durante los períodos de emergencia económica. La falta de auditorías externas y la dependencia de declaraciones juradas por parte de la empresa son inaceptables. - Implementación de una tarifa social:
Propongo establecer una tarifa social que beneficie a los sectores más vulnerables, como ya ocurre con otros servicios públicos esenciales. Este esquema debe garantizar el acceso universal al agua potable y al saneamiento, considerando la situación económica de las familias mendocinas. - Transparencia en los costos y las inversiones:
Es imprescindible que se publique un desglose de los costos del servicio por zona, un análisis técnico de la crisis hídrica en Mendoza y los detalles del cuadro tarifario diferenciado. Además, debe proporcionarse información clara sobre las inversiones prometidas y su cumplimiento. - Atención al caso del Barrio Las Viñas:
No podemos ignorar la grave situación que atraviesan los habitantes del Barrio Las Viñas, quienes aún enfrentan dificultades para acceder al agua potable. Este caso es un reflejo de la falta de planificación y acción por parte del gobierno y los entes reguladores. - Participación ciudadana inclusiva:
Propongo que las audiencias públicas se realicen en diferentes departamentos de la provincia para garantizar la participación de todos los ciudadanos. Además, es crucial que estas audiencias sean grabadas y difundidas, promoviendo así la transparencia y el acceso a la información.
Por una Gestión Digna y Transparente del Agua
El agua es un derecho humano fundamental, y su acceso no puede estar condicionado por intereses económicos ni por decisiones tomadas a espaldas de la ciudadanía. Mendoza enfrenta una crisis hídrica que requiere una gestión estratégica, eficiente y transparente. Como provincia, hemos sido pioneros en el aprovechamiento hídrico, pero las decisiones actuales no reflejan esta tradición de innovación y responsabilidad.
Mi compromiso es con los mendocinos, y seguiré trabajando para garantizar que el agua potable y el saneamiento sean accesibles para todos, especialmente para los sectores más vulnerables. No podemos permitir que los aumentos tarifarios injustificados sigan afectando los derechos y la calidad de vida de nuestras familias.
Por eso, invito a todos los ciudadanos a unirse a este reclamo, exigiendo una gestión responsable, equitativa y transparente del agua en nuestra provincia. Mendoza merece un futuro donde el acceso al agua sea un derecho garantizado, no un privilegio.